CALIDAD DE VIDA EN PACIENTES CON TRASPLANTE DE HÍGADO
- Escrito por Dra. Fernanda García Alvarado
- Publicado en Trasplante
Introducción: La calidad de vida (CV) abarca el bienestar físico,social, psicológico y espiritual. El bienestar físicose determina por la actividad funcional, la fuerzao la fatiga, el sueño y el reposo, el dolor y otrossíntomas. El bienestar social, tiene que ver con lasfunciones y las relaciones, el afecto y la intimidad,la apariencia, el entretenimiento, el aislamiento,el trabajo, la situación económica y el sufrimientofamiliar. El bienestar psicológico se relaciona conel temor, la ansiedad, la depresión, la cognición yla angustia que genera la enfermedad y eltratamiento. Por último, el bienestar espiritualabarca el significado de la enfermedad, la esperanza, la trascendencia, la incertidumbre, la religiosidad y la fortaleza interior.
En las últimas dos décadas, el trasplante ha sido considerado uno de los mayores avances de la medicina, no sólo por su papel en la recuperación de la salud, sino también por el mejoramiento de la calidad de vida de personas con enfermedades crónicas y/o terminales por la falla de alguno de sus órganos.
La CV de los pacientes con enfermedad hepática se ve afectada por los síntomas propios de la enfermedad, como fatiga, ascítis, encefalopatía y sangrado gastrointestinal. Este aspecto varía después del trasplante, ya que muchos pacientes reportan una mejoría, incluidos cambios psicológicos, pues la persona experimenta un estado de bienestar generalizado debido al cumplimiento de las expectativas.
El trasplante puede ser el cambio de un problema médico por otro, lo cual no prevén los pacientes, a pesar de ser informados y preparados al respecto. No obstante, es una opción cuando hay una amenaza a la vida por la complicación de la condición hepática y se ha deteriorado la calidad de vida en niveles inaceptables, incluyendo un daño irreversible en el sistema nervioso central. El trasplante de hígado es considerado uno de los procedimientos más complejos de la cirugía moderna, cuyo suceso depende de una completa infraestructura hospitalaria, además de un equipo multiprofesional capacitado para atender pacientes gravemente debilitados e inmunodeprimidos. Es utilizado como recurso para obtener la sobre vivencia del paciente portador de una lesión hepática irreversible, cuando no hay ninguna otra forma de tratamiento disponible.
Objetivo: Indagar cómo es la calidad de vida de pacientes trasplantados de hígado.
Metodología: La metodología de la investigación fue una revisión bibliográfica en trabajos previamente publicados sobre calidad de vida y trasplante, que abarcaban la respuesta a una encuesta de calidad que involucra los parámetros que se describen en el cuadro anexo, antes y despues del procedimiento. Para ello los autores se apoyaron de medios electrónicos disponibles en donde se han encontrado una gran variedad de trabajos de investigación de todo tipo que hablan de los trasplantes de hígado y donde toman en cuantos elementos de importancia que se utilizaran como base para el presente trabajo.
Resultados: En la CV post-trasplante, al igual que previamente, influye la enfermedad de base y el estado general del paciente. Por eso, una adecuada selección de los candidatos incidirá de forma positiva en las posibilidades de éxito posterior. Los resultados acerca de la recuperación de la CV difieren, pero la valoración final y coincidente, comúnmente aceptada, es que la CV mejora después del trasplante. Sin embargo, hay que matizar esa afirmación y exponer los diferentes niveles alcanzados en las distintas áreas.
La calidad de vida reflejada en la integridad de la persona representa una importante medida de éxito de una intervención médica, más allá de una alta tasa de supervivencia, debido a que la calidad de vida involucra cada detalle de las actividades de la vida diaria de la persona y su funcionamiento social. Aunque haya efectos inherentes a la recuperación pos trasplante, como: limitación de actividades físicas, fatiga, cansancio y decaimiento, los participantes no se sintieron afectados en su calidad de vida, pues demostraron tener mejor autocontrol.
Los pacientes consideran que el trasplante mejoró su calidad de vida en un 100%, no sólo por los cambios físicos, sino que también les permitió recuperar ciertas posibilidades perdidas a raíz de la enfermedad. De aquí que puedan realizar actividades sociales, familiares, físicas con independencia, y disfrutar de la vida. No obstante, señalan que debido a la inmunosupresión, y a los cuidados propios del trasplante y/o sus efectos secundarios, se presentan diferentes enfermedades que debilitan el cuerpo.
Por otro lado, la revisión hecha por los autores mostraron que la categoría de función social, obtuvo la puntuación más alta (79.73 ± 23.26). La calidad de vida de los pacientes con trasplante hepático se relaciona con la posibilidad de un buen estado de salud sin importar el tiempo pos trasplante, integrándose en sus áreas social, laboral y familiar con independencia física, realizando actividades que les permitan recrearse y trabajar.
Conclusión: Los trasplantes de hígado o hepáticos se realizan cuando hay una falla hepática que impide que el hígado cumpla sus funciones dentro del cuerpo humano como: crear proteínas y otras sustancias para el cuerpo, eliminar productos de desecho y toxinas de la sangre, metabolizar fármacos y almacenar energía.
La calidad de vida de un paciente trasplantado en la mayoría de los casos va a depender de la edad del paciente, la mayoría de los estudios indican que un alto porcentaje regresa a una normalidad en su vida, en todos los aspectos, aun cuando un trasplante puede generar oros padecimientos.
Es necesario entender que el trasplante de órganos debe ser observado mas allá de una perspectiva médica, para incluir un marco multidisciplinar, desde un punto de vista biopsicosocial, que asume el concepto de calidad de vida, relacionado con un estado de bienestar físico, mental y social, y no solamente con la ausencia de enfermedad.
Es también importante difundir en los centros de trasplante la importancia del soporte psicológico a los pacientes en las etapas pre y postrasplante, ya que de su bienestar depende que puedan asumir su nueva condición, y así tener una adecuada calidad de vida, a pesar de las dificultades propias del trasplante y sus cuidados.
Referencia:
Gamarra, M. D. M., Montoya, F. A. M., Quinto, J. A. P., & Enjundia, G. M. A. (2020). Calidad de vida en pacientes con trasplante de hígado. RECIMUNDO, 4(1 (Es)), 250-255.
Mendoza-Sánchez F, Ramírez-González LR, Reyes-Cruz AA, González-Ojeda A, Hernández-Machuca JS, Fuentes-Orozco C. Evaluación de la calidad de vida en pacientes con trasplante hepático. Rev Med Inst Mex Seguro Soc 2016; 54 (2).
Artículo de divulgación revisado y adaptado por el Dr. Jorge Luis Poo, hepatólogo clínico, miembro del Comité Editorial de tu portal AMHIGO y fundador del Grupo Mexicano para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas