LA TRANSICIÓN EN EL EQUIPO DE SALUD; PUNTOS DE CUIDADO

No deben ser pocos los focos amarillos y consideraciones que la virtual presidenta Electa y el doctor David Kershenobich, nombrado secretario de Salud del próximo Gobierno, con su equipo técnico y jurídico, debe estar analizando y evaluando a la hora de la recepción-entrega de parte del equipo saliente y, en general, para llevar bien el proceso de transición. 
Una primordial es la negociación con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), desde ya para recuperar el presupuesto que le recortaron este año a menos de la mitad (55.8%) a la dependencia. Fueron más de 113,000 millones de pesos que le quitaron sin explicación a la Secretaría de Salud para entregarlos al nuevo organismo IMSS-Bienestar, mismos que esperemos reporte en qué los destinó. Salud fue la dependencia que sufrió la mayor restricción de gasto este año, y de hecho le dejaron el menor presupuesto de su historia e implícitamente le quitaron funciones.

Para empezar con el pie derecho y poder ejercer su papel rector, a la nueva administración y al nuevo secretario le tocará, ahora sí (lo que no hizo su antecesor), defender con las uñas el presupuesto de Secretaría de Salud. De lo contrario, con un presupuesto paupérrimo no podrá cumplir las responsabilidades que indica la ley para el secretario de Salud. El equipo hacendario que ejecutó el recorte es el mismo que define el PEF 2025, así que debe conocer cómo enmendar ese error.

Otro aspecto importante tiene que ver con el cambio de estructura de la dependencia que se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

Fue a fines de 2020 en la conferencia mañanera donde se explicó a detalle que Cofepris pasaría a la adscripción de la Subsecretaría de Prevención y Promoción, que desaparecía la Subsecretaría de Integración y Desarrollo (que llevaba la Dra. Assa Cristina) y que la mayoría de las direcciones de ésta pasaban al control de la primera, la que justamente encabezaba el entonces zar de la pandemia, Hugo López-Gatell. Incluso se mandó el anteproyecto a CONAMER, pero en la Consejería Jurídica de Presidencia alguien sensato lo detuvo y, al final, nunca se firmó el nuevo Reglamento Interior de la Secretaría de Salud. Entonces los cambios quedaron en la imaginación de López-Gatell.

Un aspecto adicional es que, con la centralización, la Secretaría de Salud tampoco ya está involucrada en la transferencia de recursos a los estados; toda la bolsa para entidades la controla ahora IMSS Bienestar y a través de sus delegaciones en los estados les transferirán presupuesto. Una de las áreas que aún está bajo adscripción de la Secretaría es la Comisión Coordinadora de institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad (CCINSHAE), pero de por sí ya le quitaron algunos hospitales, y ahora hay la versión de que dicha comisión podría terminar desapareciendo, lo cual le restaría aún más a la dependencia. El punto es que está muy disminuida la rectoría del sector público de salud y, seguramente, la Doctora Claudia Sheinbaum y el Doctor Kershenobich están escuchando a los expertos asesores para retomar áreas prioritarias y saber bien cómo actuar a fin de impulsar la capacidad rectora del sistema público de Salud que será su responsabilidad del secretario y que también requiere de recursos. Ahí será importante también que el Consejo de Salubridad General retome su fuerza rectora conforme marca la Constitución.

Por lo pronto, lo menos que deben garantizar la virtual presidenta Electa y el próximo secretario de salud es elegir a su equipo, como son los subsecretarios, pero fue pésima señal que el Presidente desde Palacio ande recomendando al actual subsecretario Ruy López Ridaura, porque es sabido que él es muy cercano de López-Gatell y esa no es buena señal para el segundo piso de la 4T.

Escrito por:
Mtra. Maribel Ramírez Coronel
https://www.eleconomista.com.mx/opinion/La-transicion-en-el-equipo-de-Salud-puntos-de-cuidado-20240730-0155.html